Carolina Baldini sin Diego Simeone se confiesa en la Isla de Caras

En la isla el tiempo parece suspenderse y transcurrir caprichosamente. Ya advierten los lugareños sobre el hechizo de Angra dos Reis: Aquí los tiempos no son los que marca el reloj. Como si una energía especial se encargara de ahuyentar los pecados de la urbe, aquí la Naturaleza rige soberana. Nada de horarios estrictos, ni obligaciones de turno. En la isla un mágico fenómeno logra que cada agasajado abrace el disfrute sin prisas y se acople al ritmo sosegado que domina en esta tierra de estrellas de mar y aguas calmas. Sólo las personalidades más tenaces escapan a la regla.

Ese fue el caso de Carolina Baldini (34), durante los días que se alojó en la Isla de CARAS. Aun cuando la lluvia la recibió en su primer día de estadía y acompañada por hits de los años ´80 y ´90 (que transporta en un coqueto reproductor digital con forma de cartera), Carolina mantuvo un firme entrenamiento anaeróbico que incluye tanto exigentes ejercicios con pesas y abdominales, como rutinas de fuerza y coordinación supervisados por Flavia Pittis, su personal trainer y única compañera de viaje. “Después de tres hijos hay que mantener este cuerpo”, dice ella. Viene de un año muy difícil, en que la decisión de retomar su carrera como modelo le trajo tantas satisfacciones —volver a las pasarelas, ser parte de “Bailando por un sueño”—, como sinsabores surgidos luego del tsunami mediático que generó la crisis que vivió con su marido, Diego Simeone (37), y la polémica figura de un supuesto tercero en discordia. Todo un entorno con alta exposición y el peaje más caro: el del escándalo.

extraido de: http://www.caras.uol.com.ar/nota.xtpl/Carolina-Baldini-se-confiesa.htm?publicid=a65QRFlIrwDBf_zP_NAM6hw